SANTA FE - Dos ex agentes de la Policía de Albuquerque (APD, por sus siglas en inglés) se declararon culpables el viernes de cargos federales de crimen organizado, extorsión y aceptación de sobornos en una amplia investigación de corrupción sobre un plan que supuestamente permitió a personas arrestadas por conducir en estado de ebriedad evadir la condena, según los registros judiciales.
Los exagentes trabajaban en la unidad de conducción en estado de ebriedad (DWI, por sus siglas en inglés) del Departamento de Policía de Albuquerque y reconocieron haber conspirado con el abogado Ricardo Méndez en un plan que duró años. Los investigadores federales dicen que el bufete de abogados de Méndez ofreció regalos y miles de dólares en sobornos a los agentes a cambio de que se desestimaran los casos de sus clientes.
Los agentes, Joshua Montaño y Honorio Alba, firmaron acuerdos para declararse culpables y cooperar con los investigadores a cambio de indulgencia en cargos que de otro modo podrían resultar en largas sentencias de prisión. Los abogados de Montaño y Alba no respondieron de inmediato a los mensajes telefónicos y de correo electrónico.
El mes pasado, Méndez se declaró culpable de una serie de cargos federales que incluyen crimen organizado y soborno.
Los clientes pagaban a Méndez o a su socio un honorario de abogado en efectivo, según los registros judiciales. Luego, Méndez pagaba a los oficiales en efectivo o en forma de regalos o servicios legales para que no comparecieran ante el tribunal como testigos necesarios del incidente de conducción, lo que resultó en la desestimación del caso.
El jefe de policía de Albuquerque, Harold Medina, elogió el trabajo del FBI y la Fiscalía de Estados Unidos en Albuquerque en la investigación. Dijo que Montaño y Alba renunciaron en lugar de ser entrevistados por los investigadores de asuntos internos del Departamento de Policía de Albuquerque.
“Me gustaría poder decir que este es el punto final, pero seguimos descubriendo detalles de esta conspiración y de quienes participaron en ella”, dijo Medina en una declaración enviada por correo electrónico.
Más de una docena de oficiales han renunciado, han sido puestos en licencia administrativa, han sido despedidos o reasignados temporalmente.
