SANTA FE, Nuevo México - La gobernadora de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, limitó el viernes el alcance de una orden que suspendía ampliamente el derecho a portar armas de fuego en Albuquerque y sus alrededores para que se aplique únicamente a parques públicos y áreas de juego donde se reúnen los niños y sus familias.
El anuncio de la gobernadora se produjo días después de que un juez federal bloqueara parte de la orden ante las crecientes críticas por la acción de Lujan Grisham y las impugnaciones legales por parte de los defensores del derecho a portar armas.
Los disparos y los crímenes violentos en Albuquerque han continuado sin cesar durante la semana desde que la gobernadora emitió la orden temporal de salud pública, dijo en una conferencia de prensa el viernes, y agregó que continuará buscando un "marco que será aprobado legalmente" para controlar la violencia armada.
"Anoche vimos crímenes violentos ocurrir por la ciudad que resultaron en una herida de bala, dos robos de automóviles a mano armada y un secuestro con sospechosos aún no detenidos", explicó Lujan Grisham en una comparecencia en Albuquerque junto a destacados legisladores estatales demócratas y su secretario de seguridad pública. “Tenemos una situación muy grave en nuestras comunidades que requiere resultados serios e inmediatos”, indicó la mandataria estatal.
Agregó que la orden temporal "se modifica para centrarse ahora en no portar armas abiertas u ocultas en parques públicos o áreas de juego, donde sabemos que tenemos un alto riesgo para los niños y las familias".
Las restricciones modificadas sobre armas de fuego no se aplican a los parques supervisados por la Oficina de Tierras del Estado y la división de parques estatales del Departamento de Energía, Minerales y Recursos Naturales, comunicó la oficina de la gobernadora. Las agencias supervisan docenas de áreas recreativas, desde un centro natural en Albuquerque hasta campamentos remotos en montañas y lagos.
El juez federal de distrito David Urias dijo el miércoles que la orden original de la gobernadora probablemente causaría un daño irreparable a las personas privadas del derecho a portar un arma en público para defensa propia.
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Otorgó una orden de restricción temporal para bloquear la suspensión del derecho a portar armas hasta una audiencia que se realizará a principios de octubre.
Lujan Grisham optó por no derogar por completo las restricciones a las armas, señaló Hannah Hill, directora ejecutiva de la Fundación Nacional para los Derechos de las Armas, que está impugnando la orden en un tribunal federal.
Pero la gobernadora “todavía está tratando de suspender la portación pública mediante orden ejecutiva, y esto no debe verse como un intento de buena fe de cumplir con la orden de restricción del tribunal”, aseguró Hill en un correo electrónico.
Al menos media docena de demandas cuestionan disposiciones de la orden original, incluida una petición ante la Corte Suprema de Nuevo México presentada el jueves conjuntamente por legisladores estatales republicanos, el Partido Republicano estatal y la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés).
El representante estatal republicano Randall Pettigrew de Lovington señaló que todavía está comprometido con ese desafío legal destinado a defender el derecho a portar armas, acusando a la gobernadora de un “ataque a la Constitución” deliberado.
“Son ellos tratando de averiguar hasta dónde pueden llevar una orden de salud pública”, expresó Pettigrew, demandante en la impugnación en un tribunal estatal. “No voy a parar. No puedo, mis electores no me dejan y no creo que debamos" poner fin al litigio, agregó.
