ALBUQUERQUE — La temporada de chile verde de Nuevo México está en pleno apogeo, con el aroma de los pimientos asados frescos impregnando el aire, pero los productores y exportadores en México están igual de ocupados y eso está causando problemas en la frontera internacional.
Las autoridades informaron el lunes que los inspectores agrícolas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU han estado procesando docenas de importaciones de chile diariamente en el puerto de entrada en Columbus, Nuevo México. Están buscando plagas en los envíos que puedan afectar la producción nacional en Nuevo México, donde el chile verde es un cultivo característico y un ícono cultural.
“Chile es un gran cultivo para los agricultores en Nuevo México, por lo que es importante que los especialistas en agricultura de CBP identifiquen y eviten que cualquier plaga peligrosa ingrese al estado y se propague potencialmente”, dijo el director interino del puerto de Columbus, Sam Jiménez, en un comunicado.
Como parte de la “Operación Chile Caliente”, Jiménez sostuvo que se están asignando inspectores agrícolas a Columbus desde otros lugares para ayudar con el aumento del tráfico.
Los inspectores procesarán alrededor de 100 envíos de chile al día durante la parte más activa de la temporada. La temporada de importación mexicana es más activa entre septiembre y octubre, pero puede prolongarse hasta mediados de diciembre. El año pasado manejaron poco menos de 11.000 envíos de pimientos rojos y verdes desde México.
Las importaciones han crecido significativamente cada temporada, y los inspectores observaron un aumento de casi el 25% desde 2016. Las autoridades esperan un crecimiento continuo este año.
A pesar de más importaciones, los agricultores de Nuevo México están viendo mayores rendimientos de sus cultivos y la reputación del estado de cultivar lo que muchos han ungido como "el mejor chile verde del mundo" se está expandiendo, dijo Travis Day, director ejecutivo de la Asociación de Chile de Nuevo México.
La cosecha de chile del estado comienza a fines de julio, pero arranca en agosto. Day pasó el lunes probando hamburguesas con queso y chile verde en la Feria Estatal de Nuevo México, mientras aún se recuperaba del festival anual de chile en Hatch, Nuevo México, hace solo una semana, donde habló con personas de Nueva York, Kansas e incluso de Hawái que volaron para obtener su solución.
“Como industria, estamos en un lugar único donde la demanda es la más alta que jamás haya existido y continúa aumentando cada año”, explicó.
Sin embargo, hoy en día se cultivan menos acres de chile en Nuevo México debido a las presiones laborales y la disminución de los suministros de riego. Si bien la mayor parte de la superficie comercial se inicia a partir de semillas, algunos agricultores han vuelto a trasplantar plántulas para dar un impulso a sus cultivos. Los agricultores también están trabajando con ingenieros para desarrollar una cosechadora mecánica.
En lo que va de la temporada, las autoridades dijeron que la cosecha de chile verde de Nuevo México está más de 10 días adelantada de lo previsto y los expertos esperan que se cosechen entre 55,000 y 60,000 toneladas de pimientos.
Stephanie Walker, especialista en vegetales de la Universidad Estatal de Nuevo México, explicó que los productores de Nuevo México se han vuelto expertos en minimizar las pérdidas por problemas de enfermedades provocadas por las fuertes lluvias de verano y que el rendimiento de las nuevas variedades de chile verde está aumentando.
En el puerto de entrada, todas las importaciones de chile mexicano están sujetas a un escáner de rayos x. Luego viene una inspección física por parte de un especialista de Aduanas y Protección Fronteriza que busca plagas, enfermedades y cualquier suelo contaminado o semillas nocivas.
Si se encuentra algo, se envían imágenes digitales a los funcionarios del Departamento de Agricultura de EEUU, quienes determinan si el envío se puede liberar o devolver.
En 2021, las inspecciones resultaron en 25 casos en los que se tuvo que devolver envíos a México.
