SANTA FE — Nuevo México extenderá las órdenes de salud relacionadas con el COVID-19 por última vez hasta el 31 de marzo, esto luego de que la gobernadora, Michelle Lujan Grisham, anunciara este viernes que renovará una orden ejecutiva, pero dejará que expire a fin de mes.
“Si bien todavía estamos viendo casos de COVID-19, nuestra preparación y trabajo colaborativo han ayudado a convertir una emergencia de salud pública, única en un siglo, en una situación manejable”, manifestó Lujan Grisham en un comunicado.
Asimismo, aprovechó la situación para pedirle a las personas, especialmente a los ancianos y los inmunocomprometidos, que se mantengan al día con sus vacunas.
El Departamento de Salud de Nuevo México (NMDOH, por sus siglas en inglés) había mantenido vigentes medidas para prevenir la propagación del virus, como lo fue un mandato de mascarilla para espacios públicos interiores y un requisito para que los trabajadores de la salud y otros empleados estén al día con sus vacunas.
Por su parte, las órdenes de salud pública se extendieron por última vez en enero, ya que la variante omicron aumentó considerablemente el número de casos, esto mientras los hospitales del estado operaban por debajo de los estándares de atención que priorizan las emergencias médicas inmediatas.
